El informe presenta un análisis exhaustivo de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y el consumo de energía del sector de tecnologías de la información y comunicación (TIC) a nivel global. Se estiman las emisiones y la demanda energética del sector, abarcando desde redes de telecomunicaciones hasta centros de datos y equipos de TIC. Se destaca la necesidad de mejorar los mecanismos de informes y seguimiento de emisiones dentro del sector de las TIC, así como la intensidad de carbono y energía de las redes de telecomunicaciones. Asimismo, se exploran oportunidades para aumentar la eficiencia de estas redes. Además, el informe examina las emisiones de los centros de datos y los equipos de TIC, incluyendo estudios de caso de Francia, Singapur, el Reino Unido, Ruanda y Brasil, que muestran los esfuerzos y desafíos en la reducción de la huella de carbono y las necesidades energéticas del sector. Finalmente, se ofrecen recomendaciones clave para abordar el impacto ambiental del sector mediante esfuerzos coordinados hacia la digitalización y descarbonización. Por otro lado, la conectividad a internet en rápida expansión a nivel mundial requiere más energía y genera mayores emisiones de GEI del sector de TIC. La falta de datos precisos sobre el impacto climático del sector dificulta el desarrollo de estrategias de reducción de emisiones. A pesar de que dos tercios de la población mundial están conectados a internet, un tercio sigue sin estarlo, principalmente en países de bajos y medianos ingresos. Conectar a estas poblaciones aumentará la demanda de energía y las emisiones si no se implementan intervenciones específicas. Aunque las empresas tecnológicas son grandes compradoras de energía renovable, el sector público también tiene un papel importante en garantizar un entorno propicio para la digitalización sostenible. Para alcanzar el objetivo de reducir las emisiones del sector casi a la mitad en menos de siete años, es fundamental realizar un seguimiento preciso de las emisiones y la demanda de energía del sector para informar las políticas nacionales y las acciones climáticas.
Los esfuerzos y directrices establecidos por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) y otras organizaciones son fundamentales para ayudar al sector de Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) a alcanzar emisiones netas cero y cumplir con el objetivo de 1,5°C del Acuerdo de París. La UIT ha desarrollado estándares y metodologías técnicas específicas para evaluar el consumo de energía, las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y el impacto ambiental de las soluciones de TIC. Además, empresas de TIC públicamente listadas publican informes ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) con datos climáticos, impulsadas por requisitos de informes obligatorios, financiamiento vinculado a la sostenibilidad, presión de los accionistas y reputación. El Protocolo de Gases de Efecto Invernadero, una iniciativa conjunta del World Resources Institute (WRI) y el World Business Council for Sustainable Development (WBCSD), proporciona un marco estandarizado para que las empresas clasifiquen sus emisiones de GEI en tres alcances: Alcance 1 (emisiones directas), Alcance 2 (emisiones indirectas de la energía adquirida) y Alcance 3 (emisiones indirectas de la cadena de valor). Se destaca la importancia de contabilizar las emisiones del Alcance 3, que pueden representar la mayor fuente de emisiones para las empresas y ofrecer oportunidades significativas para reducciones de GEI. Aunque los operadores de telecomunicaciones generaron aproximadamente 133 millones de toneladas de dióxido de carbono equivalente (tCO₂e) de emisiones operativas en 2022, representando el 0,4% de las emisiones globales totales de GEI de la energía, se observa un descenso en las emisiones de alrededor del 1% anual entre 2020 y 2022. La región de Asia Pacífico representa la mayor parte de las emisiones de GEI reportadas por los operadores de telecomunicaciones, con tres operadores de China representando casi la mitad de las emisiones. Aunque se registró un aumento en las emisiones en nueve países entre 2020 y 2022, principalmente en la región de Asia y en países de ingresos bajos y medianos, el consumo de electricidad por parte de los operadores de telecomunicaciones continúa aumentando, impulsado por la creciente demanda de datos y conectividad. En este contexto, es de suma importancia para el sector de las TIC implementar estrategias efectivas para mejorar la eficiencia energética y reducir su impacto ambiental, en línea con los objetivos del Acuerdo de París y las iniciativas lideradas por la UIT y otras organizaciones relevantes.
El informe proporciona estimaciones de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y consumo de electricidad derivados de la fabricación y uso de ordenadores personales (PCs), smartphones y equipos de red, componentes clave del sector de tecnologías de la información y comunicación (TIC). En 2022, se estimaron las emisiones de fabricación de PCs en 65 millones de toneladas de CO2 equivalente (tCO2e), descendiendo respecto al año anterior debido a la menor demanda tras la pandemia de COVID-19. Las emisiones por uso de productos de PCs se estimaron en 187 millones de tCO2e y el consumo de electricidad en 392 teravatios-hora (TWh) en 2022. Para smartphones, las emisiones de fabricación se estimaron en 57 millones de tCO2e y el consumo de electricidad en 119 TWh en 2022, con reducciones asociadas a cuellos de botella en la cadena de suministro y mayor uso de energías renovables por parte de los proveedores. Las emisiones por uso de productos de smartphones se estimaron en 18 millones de tCO2e y el consumo de electricidad en 23 TWh en 2022. Respecto a la fabricación de equipos de red, los cinco principales proveedores representaron el 70% de los ingresos del sector. Se estimaron emisiones de Alcances 1 y 2 en 6 millones de tCO2e, y emisiones de cadena de suministro en 27 millones de tCO2e, con un consumo total de electricidad de 56 TWh en 2022. Las emisiones disminuyeron un 17% en 2022, probablemente debido a interrupciones en la cadena de suministro, presión de proveedores sobre sus suministradores para usar más energía renovable y mayor eficiencia energética de los productos. El informe combina estas estimaciones con datos de operadores de telecomunicaciones, centros de datos y computación en la nube para proporcionar una estimación global de las emisiones y huella energética del sector de las TIC. En cuanto a los esfuerzos para medir las emisiones de gases de efecto invernadero y el consumo de energía del sector de las tecnologías de la información y comunicación (TIC) a nivel global y en países específicos, las estimaciones globales sugieren que el sector de las TIC emitió 567 millones de toneladas de CO2 equivalente en 2022, lo que representa el 1.7% de las emisiones globales. El consumo de electricidad se estimó en 1,183 TWh en 2022, o el 4.7% del total mundial. Las emisiones incrustadas de dispositivos como PCs y smartphones representan la mayor parte (63%) de las emisiones de las TIC, seguidas de las redes de telecomunicaciones (23%) y los centros de datos (13%). La mayoría de las partes de la cadena de valor experimentaron un crecimiento moderado o negativo de emisiones de 2020 a 2022, excepto por aumentos significativos en emisiones de centros de datos de colocación (20% de crecimiento) y centros de datos de nube/contenido (46% de crecimiento). Francia es el primer país donde el regulador de telecomunicaciones (ARCEP) compila y publica datos climáticos de operadores de telecomunicaciones basados en reportes obligatorios. Los datos muestran que las emisiones crecieron un 5.4% y el uso de energía aumentó un 26% de 2017 a 2021 en el sector de las telecomunicaciones en Francia. Rwanda publica datos sobre el uso de electricidad por torres de telecomunicaciones y centros de datos, mientras que Singapur estima las emisiones de centros de datos utilizando datos de electricidad por sector económico. Brasil tiene una iniciativa voluntaria para que las empresas reporten datos climáticos públicamente, y el Reino Unido obliga a la divulgación de emisiones/energía para empresas cotizadas y grandes empresas privadas. Estos esfuerzos destacan la necesidad de una mejor medición y reporte de emisiones del sector de las TIC para apoyar los esfuerzos de mitigación climática en esta fuente creciente de emisiones.
El informe proporciona una visión general de la emisión de gases de efecto invernadero (GEI) y el consumo de electricidad en el sector de tecnologías de la información y comunicación (TIC), con un enfoque en el Reino Unido, Rwanda y Brasil. En el Reino Unido, el gobierno proporciona factores de conversión para que las empresas informen sus emisiones, pero la consistencia de datos sigue siendo una preocupación, especialmente para los centros de datos de colocación. El informe presenta datos de emisiones y consumo de electricidad para los principales operadores de telecomunicaciones y empresas de centros de datos en el Reino Unido. Rwanda es destacado como el único país en desarrollo conocido donde el regulador de las TIC publica datos de consumo de electricidad para empresas de torres de telecomunicaciones y centros de datos. El informe proporciona cifras de consumo de electricidad y emisiones para los principales operadores de telecomunicaciones en Rwanda. Brasil tiene un esquema voluntario de divulgación de emisiones de gases de efecto invernadero para empresas, y el informe presenta datos de emisiones en los tres alcances (directo, indirecto de energía adquirida y otros indirectos) para los principales operadores de telecomunicaciones y empresas de TIC que participan en el esquema. Igualmente, el informe discute el esquema de generación distribuida (GD) de Brasil, que permite a los consumidores, incluidos los operadores de telecomunicaciones, instalar generadores de energía renovable y devolver el exceso de electricidad a la red, compensando su electricidad comprada. Los operadores de telecomunicaciones en Brasil han estado adoptando activamente este esquema para alimentar sus redes. El informe, igualmente, discute el papel del sector de tecnologías de la información y comunicación (TIC) en la emisión de gases de efecto invernadero (GEI) y el consumo de energía, y resalta puntos clave para abordar la huella de carbono y las necesidades energéticas del sector. Proporciona datos sobre el consumo de electricidad y las emisiones de GEI del sector de las TIC, mostrando una tendencia creciente a nivel global. El informe enfatiza la importancia de la divulgación, agregación y evaluación de datos para facilitar la toma de decisiones informadas por parte de gobiernos y reguladores. Sugiere que las transiciones tecnológicas, como el desmantelamiento de redes heredadas y la transición a tecnologías más eficientes en energía como el 4G y 5G, pueden ayudar a reducir las emisiones. Sin embargo, estas transiciones deben ser planificadas cuidadosamente para garantizar la inclusión y evitar dejar atrás a poblaciones vulnerables. El informe destaca el papel de las modificaciones regulatorias, incentivos y la colaboración entre los sectores de las TIC y la energía en la reducción de emisiones y el apoyo al acceso sostenible a la energía. Proporciona ejemplos de cambios regulatorios en países como Brasil y Sudáfrica que han permitido que el sector de las TIC adopte fuentes de energía renovable. En general, el informe subraya la necesidad de un enfoque basado en datos, desarrollo de capacidades, planificación inclusiva e intervenciones políticas para abordar la huella de carbono y las necesidades energéticas del sector de las TIC mientras se promueve el desarrollo sostenible.