El metaverso aspira a ser el futuro de Internet: una experiencia espacial y social de Internet que utiliza tecnologías existentes y emergentes para mezclar a la perfección los mundos físico y digital. Con los recientes avances en inteligencia artificial generativa (IA), la creación y el crecimiento del metaverso pueden expandirse. Aunque los anuncios sobre la IA y el metaverso pueden competir por la atención mediática, en realidad son socios en esta evolución digital. El metaverso actuará como conducto para mezclar el mundo digital con el físico y transformar la forma en que las personas interactúan con la información, con los demás y con su entorno. Uno de los elementos centrales de este avance es la «identidad». En mayo de 2022, el Foro Económico Mundial puso en marcha la Iniciativa para Definir y Construir el Metaverso, que orquesta un enfoque integrado del desarrollo y la gobernanza del metaverso. La iniciativa se divide en dos líneas de trabajo: gobernanza y creación de valor económico y social. Su objetivo es construir un metaverso responsable, equitativo, inclusivo, diverso y accesible a través de debates con un amplio abanico de partes interesadas. En este informe, la línea de trabajo sobre gobernanza subraya el imperativo de la colaboración global para formar una comprensión compartida del metaverso y de la identidad metaversa. Su objetivo es establecer las mejores prácticas que fomenten la innovación y el crecimiento, salvaguardando al mismo tiempo la privacidad y la seguridad. Ignorar la evolución de las expectativas de identidad en el metaverso podría conducir a repetir las deficiencias actuales de Internet.
Para construir un metaverso que sea económicamente vibrante, además de equitativo, accesible e integrador, hay que prestar atención a los derechos humanos, la igualdad y la sostenibilidad. El informe se basa en las contribuciones de un variado grupo de trabajo mundial de más de 150 expertos de los sectores académico, de organizaciones internacionales, de la sociedad civil, gubernamental, tecnológico y empresarial. El metaverso, considerado como la versión futura de Internet, sigue suscitando interés en todo el mundo en materia de investigación, desarrollo e inversión. Tiene un inmenso potencial para remodelar la forma en que las personas viven, trabajan e interactúan. A medida que la convergencia de las tecnologías de realidad extendida (RX) difumina las fronteras entre los mundos físico y virtual, se hace imperativo abordar el tema de la «identidad» para garantizar un metaverso inclusivo, equitativo, accesible, seguro y que preserve la privacidad.
Este informe pone de relieve el papel que desempeña la identidad metaversal en el diseño de experiencias humanas y anima a las partes interesadas a navegar por las complejidades de la identidad metaversal. Estas capas abarcan las identidades humanas y la aparición de entidades digitales: avatares, agentes virtuales, réplicas digitales y otros activos que contribuyen al rico tapiz de los habitantes del metaverso.
A medida que la gente pase más tiempo explorando, jugando y socializando en experiencias digitales, la identidad metaversal de una persona será fundamental para su vida cotidiana, así como para la forma en que exprese su identidad personal. La educación sobre qué es y cómo utilizarla con seguridad será transformadora. Dado el amplio concepto sociotécnico de identidad, las implicaciones y reflexiones de este documento son pertinentes para un público más amplio, más allá de quienes se centran principalmente en la construcción de la identidad digital. Un grupo diverso de múltiples partes interesadas debe reunirse para afrontar los retos de la identidad y esculpir un metaverso que sea seguro, beneficioso y equitativo para todos. Aunque los elementos fundamentales de la gestión de identidades y la miríada de arquetipos de sistemas de identidad (por ejemplo, sistemas centralizados, federados y descentralizados) y las tecnologías de apoyo, como blockchain, siguen siendo relevantes, este informe va más allá de las tópicos de infraestructura y gestión de sistemas. Este informe examina la identidad como medio de crear pertenencia y presencia digitales. Al destacar las consideraciones sobre la identidad, las prácticas de datos responsables y los principios de diseño inclusivo, este informe pretende apoyar a las partes interesadas en las conversaciones sobre cómo navegar por la identidad metaversa de forma responsable y ética a través de los datos, la representación, la identificación y las entidades digitales. El metaverso ha surgido como una visión del futuro de Internet, basada en la Internet actual y en nuevas experiencias espaciales. Este informe analiza la importancia de la identidad metaversal y las consideraciones que pueden sentar las bases de una próxima era de internet inclusiva y que preserve la privacidad La identidad metaversal va más allá de un ser humano tangible e incluye entidades digitales. Éstas abarcan una gama de entidades que van desde simples chatbots basados en texto hasta complejos avatares de apariencia humana y dobles digitales fotorrealistas, o réplicas digitales. Las entidades digitales pueden representar seres humanos (por ejemplo, mediante avatares), sistemas (por ejemplo, mediante chatbots), objetos (por ejemplo, mediante gemelos digitales) u otros conceptos abstractos, y son capaces de diversos grados de interacción, autonomía y comportamiento dentro de las experiencias digitales. Las entidades digitales serán un aspecto habilitador de la identidad metaversal, facilitando y aumentando las interacciones digitales. La fase inicial de desarrollo del metaverso presenta una oportunidad única para dar prioridad a la creación de un marco de identidad metaverso que defienda la inclusión, la accesibilidad, la equidad, la diversidad y la sostenibilidad, al tiempo que permita la seguridad y la innovación. Para lograrlo, las partes interesadas deben aprender de las conversaciones sobre la identidad en el mundo real y de los retos de las generaciones anteriores de Internet, y avanzar con determinación. Sin estas importantes conversaciones, las partes interesadas corren el riesgo de repetir los errores de las actuales experiencias en línea, que reflejan la desigualdad en el mundo real, los problemas de privacidad y las amenazas a la seguridad en un vasto lienzo digital casi infinito.
El informe aborda el concepto de identidad en el metaverso, un espacio digital tridimensional que existe en paralelo con el mundo físico. Se destaca que la identidad en el metaverso difiere de la identidad en el mundo físico, puesto que en este último se basa en atributos como la edad, el género y la nacionalidad, mientras que en el metaverso la identidad se construye a partir de avatares digitales y la interacción en entornos virtuales. Esta distinción plantea desafíos y oportunidades únicas para la sociedad, la economía y la cultura. El informe destaca que la identidad en el metaverso es fluida y maleable, permitiendo a las personas experimentar con diferentes aspectos de sí mismas de manera segura y sin las limitaciones del mundo físico. Esto puede tener implicaciones profundas en cómo las personas se relacionan entre sí, cómo se expresan y cómo se desarrollan personalmente. Además, se menciona que la privacidad y la seguridad de la identidad en el metaverso son preocupaciones importantes, dado que la recopilación y el uso de datos personales pueden ser más intrusivos en entornos digitales. En cuanto a las implicaciones económicas, el informe sugiere que la identidad en el metaverso podría transformar la forma en que las personas trabajan y ganan dinero, permitiendo nuevas formas de empleo y colaboración a nivel mundial. Sin embargo, también plantea preocupaciones sobre la desigualdad digital y la exclusión de aquellos que no tienen acceso o habilidades para participar en el metaverso. En resumen, el informe destaca la importancia de comprender y gestionar la identidad en el metaverso de manera ética y equitativa para maximizar sus beneficios y minimizar sus riesgos.