En respuesta a la aceleración de la digitalización impulsada por la pandemia de COVID-19, el Banco Interamericano de Desarrollo, el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género de Chile y Laboratoria/Kaudal lanzaron Emprender Conectadas entre 2020 y 2022. Este programa piloto, diseñado para fortalecer las habilidades digitales de las microemprendedoras en Chile, se convirtió en una respuesta esencial al desafío global. Esta nota proporciona un análisis detallado de la implementación del programa, perfilando a las beneficiarias y compartiendo los ajustes realizados durante su desarrollo. También se destacan las lecciones más relevantes para el diseño de futuros programas que busquen mejorar las habilidades digitales. El objetivo de esta nota es ofrecer una guía valiosa, llena de insights y lecciones aprendidas, para aquellos que buscan emprender futuros esfuerzos en este campo crucial. La digitalización representa una gran oportunidad para el progreso social y económico de América Latina, incluyendo Chile. No obstante, para que este avance se realice equitativamente, es esencial disminuir la brecha de género existente en el acceso y utilización de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) y en las habilidades digitales de la población. Más mujeres deben participar activamente en el sector tecnológico. Actualmente, el talento femenino se centra en áreas con menor retorno, y solo el 28% de los graduados en Chile en Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (CTIM) son mujeres. Esta segregación educativa es un factor que limita su dominio en habilidades digitales, creando un ciclo vicioso que les impide aprovechar los beneficios de la innovación tecnológica y acceder a empleos mejor pagados en áreas CTIM. En el mundo empresarial actual, la habilidad para adaptarse y prosperar en un entorno cada vez más digitalizado es fundamental. En Chile, el 38,6% de las pequeñas empresas están dirigidas por mujeres. Sin embargo, estas empresarias enfrentan un gran desafío: la falta de formación en el uso de herramientas digitales necesarias para adaptarse a los rápidos cambios tecnológicos del mercado laboral. La falta de habilidades digitales se traduce en una menor competitividad debido a una digitalización limitada. En el mundo de los negocios, la digitalización no es simplemente una opción, sino una necesidad para mantener la competitividad y la viabilidad a largo plazo. La digitalización puede mejorar la eficiencia operativa, permitir una mejor comprensión del comportamiento del cliente, facilitar el acceso a nuevos mercados y proporcionar una ventaja competitiva. Además, el mundo ha experimentado una aceleración en la adopción de tecnologías digitales a raíz de la pandemia de COVID-19.

En este nuevo contexto, las habilidades digitales son aún más esenciales. Sin una digitalización adecuada, las pequeñas empresas se arriesgan a quedarse atrás, perdiendo oportunidades de crecimiento y rentabilidad. Por lo tanto, mejorar las habilidades digitales de las microempresarias es de vital importancia. Con una formación adecuada, estas empresarias pueden navegar con confianza en el entorno digital, aprovechar las oportunidades que la tecnología brinda y, en última instancia, mejorar la competitividad y sostenibilidad de sus empresas. Capacitarse en competencias digitales no solo las empodera para manejar eficazmente sus negocios, sino que también contribuye a la equidad de género en el mundo empresarial y a la economía en general. El programa Emprender Conectadas nace durante la crisis derivada de la pandemia por COVID-19 como un programa virtual destinado a reforzar las habilidades digitales y adaptabilidad al cambio de las microempresarias chilenas. Para ingresar a Emprender Conectadas, las microempresarias debían cumplir con tener un emprendimiento formal y en funcionamiento, dedicación a tiempo completo (o cercano) a su emprendimiento, registrar ventas durante los últimos 12 meses, tener un nivel de digitalización que le permita registrarse en una plataforma, conexión a internet y un dispositivo smartphone, Tablet o computadora. En su diseño inicial, el programa ofrecía una plataforma virtual con microcápsulas de contenido asíncrono en varios temas, a las cuales las participantes podían acceder libremente según sus necesidades de capacitación en distintas herramientas digitales, abarcando áreas como logística, marketing, comunicaciones, finanzas, entre otras. Después de varias iteraciones y aprendizajes acerca del perfil de las emprendedoras que se unían al programa, Emprender Conectadas evolucionó en su último año de implementación hacia una serie de talleres virtuales sincrónicos, a los cuales las participantes se inscribían según sus necesidades de formación digital. Emprender Conectadas se organiza en cohortes o generaciones de microempresarias. Con el apoyo de los gobiernos locales (municipalidades), se realizaron convocatorias masivas invitando a las potenciales participantes a inscribirse en un seminario web inicial. Este seminario les permitía ajustar sus expectativas sobre los conocimientos que podrían adquirir a través de la plataforma. Si consideraban que estos podrían ser beneficiosos para sus negocios, se les animaba a registrarse en el programa. Emprender Conectadas alcanzó a una totalidad de 6.009 mujeres, de las cuales se graduaron el 20%. En la versión inicial, utilizando una plataforma asincrónica, 513 mujeres culminaron con éxito la experiencia. A pesar de que en número absolutos la mayor parte de estas graduadas proviene de la versión inicial del programa, con dos fases y una duración cercana a las 5 horas de capacitación, la segunda versión del programa fue más eficaz en retener a las emprendedoras y acompañarlas hasta su graduación.

El informe destaca los hallazgos y conclusiones derivados de un programa piloto diseñado para fortalecer las capacidades digitales de las microemprendedoras en Chile. El proyecto Emprender Conectadas tuvo como objetivo principal proporcionar herramientas y conocimientos tecnológicos a mujeres que dirigen pequeños negocios, con la intención de mejorar sus oportunidades en un entorno económico cada vez más digitalizado. El informe resalta el contexto socioeconómico en el que se desarrolló el programa, subrayando la importancia de cerrar la brecha digital entre géneros y brindar igualdad de oportunidades en el ámbito empresarial. Detalla las estrategias implementadas durante el piloto, como talleres, capacitaciones y acceso a recursos digitales, con el propósito de aumentar la alfabetización digital y fomentar la adopción de tecnología en los emprendimientos dirigidos por mujeres. Además, el informe examina los resultados obtenidos a través de métricas de impacto, como el crecimiento de ventas, la diversificación de canales de comercialización y la mejora en la visibilidad en línea de los microemprendimientos participantes. También analiza los desafíos y obstáculos enfrentados durante la implementación del programa, identificando áreas de mejora para futuras iniciativas similares. Finalmente, el informe concluye resaltando la importancia de continuar desarrollando programas que fortalezcan las habilidades digitales de las microemprendedoras, enfocándose en la inclusión, el acceso equitativo a recursos tecnológicos y la capacitación continua como pilares fundamentales para potenciar el crecimiento y la sostenibilidad de los negocios liderados por mujeres en un entorno digital en constante evolución.

Para leer más ingrese a:

https://publications.iadb.org/es/potenciar-las-habilidades-digitales-de-las-microemprendedoras-lecciones-del-piloto-emprender

https://publications.iadb.org/publications/spanish/document/Potenciar-las-habilidades-digitales-de-las-microemprendedoras-lecciones-del-piloto-Emprender-Conectadas-en-Chile.pdf