En Oriente Medio y Norte de África (MENA) se encuentran algunos de los líderes mundiales en términos de adopción de 5G, lo que refleja los ambiciosos planes de despliegue de los operadores, respaldados por una normativa favorable y una fuerte demanda de nuevos servicios por parte de los consumidores. Las redes 5G cubren ya el 75 % o más de la población en los países del CCG, y los operadores de estos mercados se están centrando cada vez más en mejorar la cobertura 5G en las zonas menos densamente pobladas, al tiempo que aumentan la inversión para apoyar el creciente impulso de los casos de uso que permiten la 5G autónoma (SA) y la 5G avanzada. La conectividad 5G ya está demostrando ser un potente impulsor del crecimiento del PIB, y se espera que la contribución de la 5G al PIB en Oriente Medio y Norte de África alcance algo menos de 60.000 millones de dólares en 2030 (el 13% del impacto económico anual global de la telefonía móvil en la región). Más allá de su contribución al PIB, el ecosistema móvil también apoya más de 800.000 puestos de trabajo (directa e indirectamente) y hace una contribución sustancial a la financiación del sector público, con 20.000 millones de dólares recaudados a través de impuestos en 2022. Esta contribución económica subraya la importancia de que las partes interesadas tomen las medidas adecuadas para mantener el impacto de los servicios móviles en la economía digital, con la disponibilidad de espectro como motor clave de una 5G asequible para todos. Mientras tanto, la conectividad móvil sigue siendo un salvavidas para la sociedad, ya que ayuda a las personas y a las empresas a mantenerse conectadas durante periodos difíciles. Esto fue especialmente evidente en la región de Oriente Medio y Norte de África en 2023, ya que varios países de la región tuvieron que hacer frente a diversas crisis humanitarias debidas a conflictos y desastres naturales. Los operadores de telefonía móvil también han estado a la vanguardia de los esfuerzos de respuesta, ofreciendo llamadas gratuitas para ayudar a la gente a mantenerse en contacto, permitiendo soluciones innovadoras de rescate y proporcionando materiales de socorro para los más vulnerables. La armonización del espectro sigue siendo clave para el éxito de las redes móviles. Dado que el espectro es un recurso escaso, garantizar la disponibilidad oportuna de las bandas principales debe ser una prioridad. Se necesitarán 2 GHz de espectro de banda media (1-7 GHz) por mercado, de media, de aquí a 2030 para garantizar los requisitos de velocidad y calidad del móvil 5G. Las bandas medias ofrecen capacidad en toda la ciudad, y una capacidad suficiente es importante para minimizar la densificación de la red, manteniendo bajos tanto los costes como las emisiones de carbono.
Mientras tanto, la conectividad móvil sigue siendo un salvavidas para la sociedad, ya que ayuda a las personas y a las empresas a mantenerse conectadas durante periodos difíciles. Esto fue especialmente evidente en la región de Oriente Medio y Norte de África en 2023, ya que varios países de la región tuvieron que hacer frente a diversas crisis humanitarias debidas a conflictos y desastres naturales. La banda de 3,5 GHz representa la cuna de la 5G, mientras que la de 6 GHz proporcionará la expansión necesaria durante esta década. Para 2030, también se necesitará una media de 5 GHz de espectro de banda alta (mmWave) por mercado para satisfacer la demanda de los distintos casos de uso de 5G, como la banda ancha móvil mejorada (eMBB), el acceso inalámbrico fijo (FWA) y las redes empresariales. Más espectro de banda baja (por debajo de 1 GHz), que da cobertura a zonas amplias y rurales, puede contribuir a que la 5G ofrezca igualdad digital. La adición de 600 MHz a la cartera de banda baja puede llevar más crecimiento económico a lugares remotos e impulsar mayores velocidades en zonas rurales, reduciendo la brecha entre zonas urbanas y rurales. Los abonados a la telefonía móvil en Oriente Medio y Norte de África alcanzarán los 550 millones en 2030, y el Norte de África representará casi el 45% de los nuevos abonados de la región entre 2022 y 2030. En términos absolutos, cuatro países -Argelia, Egipto, Irán y Turquía- tendrán el mayor número de abonados móviles únicos. Juntos, representarán más de la mitad del total regional de abonados móviles únicos en 2030. La penetración de la telefonía móvil en Oriente Medio y Norte de África alcanzará el 77% en 2030, por encima de la media mundial del 73%. Los niveles de penetración varían mucho: los Estados del CCG tienen una tasa de penetración media del 89%, mientras que otros mercados, como las Comoras, Yibuti y Somalia, tienen tasas de penetración inferiores al 40%. La 5G está cobrando impulso en MENA, con el lanzamiento de nuevas redes y la rápida expansión de las redes existentes. Jordania es el último país de la región en introducir la tecnología 5G, tras el lanzamiento de servicios comerciales por Umniah y Orange Jordan en mayo de 2023 y julio de 2023, respectivamente. A pesar de la creciente adopción de 5G, 4G seguirá siendo la tecnología dominante en la región a medio plazo, representando más del 50% de las conexiones totales hasta 2026. Mientras tanto, las redes tradicionales (2G y 3G) están en vías de desaparición. Varios países han esbozado planes para eliminar las redes heredadas y reasignar espectro a las redes 4G y 5G.
El informe ofrece un análisis detallado sobre la situación actual y las tendencias emergentes en la región del Medio Oriente y África del Norte (MENA) en relación con la economía móvil. Presenta un panorama general completo sobre la adopción y el impacto de la tecnología móvil en esta región específica. El informe destaca el impresionante crecimiento continuo del uso de dispositivos móviles en el MENA. Se enfoca en la penetración de teléfonos inteligentes, la expansión de la conectividad 5G y el aumento del acceso a Internet móvil en diferentes países. Este crecimiento ha impulsado diversas oportunidades económicas y sociales, desde el avance en servicios financieros móviles hasta la transformación digital de múltiples sectores. Además, el informe examina el impacto de la economía móvil en la vida cotidiana de las personas en la región. Se exploran los cambios en los hábitos de consumo, la influencia en la educación y la salud, así como el impulso a la inclusión digital y la innovación en el ámbito empresarial. Se resalta cómo la tecnología móvil ha facilitado la interconexión y la accesibilidad, abriendo nuevas oportunidades para el desarrollo económico y social. Asimismo, el informe analiza los desafíos y las oportunidades futuras para la economía móvil en el MENA. Se discuten aspectos como la ciberseguridad, la regulación gubernamental, la infraestructura digital y la sostenibilidad. Además, se identifican áreas clave para el crecimiento futuro, como la inteligencia artificial, el Internet de las cosas (IoT) y las aplicaciones móviles innovadoras, que podrían ser impulsores significativos para el desarrollo de la región. En resumen, el informe proporciona una visión detallada de la evolución actual y el potencial futuro de la economía móvil en el MENA, destacando su impacto en diversos aspectos de la vida y subrayando la importancia de aprovechar plenamente las oportunidades que esta tecnología ofrece para el crecimiento económico y la mejora social en la región.
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