Inventory of Support Measures for Fossil Fuels 2024

El impacto de los subsidios a los combustibles fósiles sigue siendo un tema crucial en el debate sobre la sostenibilidad energética y los compromisos climáticos internacionales. A pesar de una reducción significativa en los costos fiscales asociados con estas medidas en 2023, aún representan una carga considerable para los presupuestos públicos, destacando las complejidades y contradicciones en la transición hacia un modelo energético más limpio y sostenible. Estos subsidios, diseñados en muchos casos para amortiguar los costos energéticos para los consumidores y productores, alcanzaron 1,1 billones de dólares en 2023, lo que, aunque representa una disminución respecto a los niveles de 2022, sigue siendo notablemente alto en comparación con el promedio histórico. Esta situación refleja el desafío de equilibrar las necesidades económicas inmediatas con los objetivos de largo plazo relacionados con la reducción de emisiones y el cambio climático.


La estructura de los subsidios demuestra una fuerte inclinación hacia el consumo de combustibles fósiles, con más del 90% del costo fiscal destinado a este propósito. Sin embargo, una gran parte de estas medidas carece de un enfoque específico, beneficiando de manera desproporcionada a sectores y grupos que no necesariamente enfrentan vulnerabilidad económica. Por ejemplo, el apoyo al consumo residencial, que alcanzó un récord de 189 mil millones de dólares en 2023, ha crecido significativamente, mientras que los sectores de manufactura e industria también han experimentado un aumento sustancial en la ayuda recibida. Este crecimiento en los subsidios al consumo se produce en un contexto donde los precios energéticos han disminuido, lo que pone en evidencia la necesidad de rediseñar estas políticas para que sean más equitativas y eficientes. Las medidas actuales, aunque alivian la carga de los costos energéticos, frecuentemente distorsionan los precios y perpetúan la dependencia de los combustibles fósiles, lo que a su vez dificulta la adopción de alternativas más limpias.


En paralelo, los incentivos para la descarbonización, como los impuestos al carbono y los sistemas de comercio de emisiones, se han mostrado insuficientes para contrarrestar el impacto de los subsidios a los combustibles fósiles. La cobertura de emisiones sujetas a precios positivos se mantuvo estancada en el 42% entre 2021 y 2023, lo que refleja un avance limitado en la implementación de políticas de precios al carbono efectivas. Aunque algunos países han incrementado los precios de los permisos de emisiones en los sistemas de comercio y los impuestos al carbono, estos incrementos han sido modestos y no compensan el efecto negativo de los subsidios sobre las señales de precio. Este escenario refuerza la necesidad de una mayor coherencia en las políticas públicas, donde los esfuerzos para incentivar la descarbonización no se vean neutralizados por medidas que favorecen el uso continuo de combustibles fósiles.


Un aspecto preocupante es el impacto de estos subsidios en los compromisos climáticos internacionales y en las estrategias de transición energética. A nivel global, la implementación de subsidios a los combustibles fósiles contradice directamente los objetivos establecidos en acuerdos como el Pacto Climático de Glasgow, que llama a la eliminación progresiva de los subsidios ineficientes. Además, el elevado costo fiscal de estas medidas limita los recursos disponibles para invertir en tecnologías limpias, eficiencia energética e innovación, áreas clave para acelerar la transición hacia un modelo energético descarbonizado. Reformar los subsidios no solo liberaría recursos financieros, sino que también enviaría una señal clara al mercado y a los consumidores sobre la necesidad de reducir la dependencia de los combustibles fósiles.


En el contexto social, los subsidios a menudo se justifican como un mecanismo para proteger a los sectores más vulnerables de la población frente a las fluctuaciones de los precios energéticos. Sin embargo, su diseño actual tiende a beneficiar más a los hogares de mayores ingresos, que consumen más energía debido a factores como viviendas más grandes o el uso de vehículos más grandes y menos eficientes. Esto no solo plantea problemas de equidad, sino que también reduce la eficiencia de estas medidas como herramientas para mitigar la pobreza energética. Para abordar esta problemática, es crucial que los gobiernos rediseñen los subsidios para que estén mejor dirigidos y sean temporales, centrándose en apoyar a los hogares y empresas que realmente enfrentan dificultades económicas.


Además de los efectos sociales y económicos, los subsidios tienen un impacto significativo en las señales de mercado relacionadas con el uso de energía. Al reducir artificialmente el precio de los combustibles fósiles, desincentivan la adopción de fuentes de energía renovables y tecnologías limpias, perpetuando un modelo energético insostenible. En este sentido, la transición hacia un sistema energético descarbonizado requiere no solo la eliminación gradual de los subsidios ineficientes, sino también el fortalecimiento de los instrumentos de política que promuevan la inversión en energía renovable y la eficiencia energética. Este enfoque permitiría un cambio más rápido hacia fuentes de energía sostenibles, al tiempo que se abordan las necesidades económicas y sociales de las poblaciones más vulnerables.


Finalmente, la reformulación de los subsidios a los combustibles fósiles debe ser vista como una oportunidad para alinear las políticas fiscales con los objetivos climáticos y sociales. Esta reforma requiere un enfoque equilibrado, donde las medidas a corto plazo para aliviar la carga de los costos energéticos se complementen con estrategias a largo plazo para promover la sostenibilidad y la resiliencia energética. La transición hacia un modelo energético más limpio y eficiente no solo es esencial para cumplir con los compromisos climáticos internacionales, sino también para garantizar un futuro más justo y sostenible para las próximas generaciones.

Para leer más ingrese a:

https://www.oecd-ilibrary.org/trade/oecd-inventory-of-support-measures-for-fossil-fuels-2024_a2f063fe-en

https://www.oecd-ilibrary.org/docserver/a2f063fe-en.pdf?expires=1733762251&id=id&accname=guest&checksum=28B9A7AE55F11DABD8E066D0FE4F2E41

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