The Path to a New Era for Nuclear Energy

El camino hacia una nueva era para la energía nuclear es un informe elaborado por la Agencia Internacional de la Energía (AIE) que analiza las oportunidades que ofrece esta fuente energética para enfrentar los desafíos climáticos y de seguridad energética. Además, identifica los elementos críticos necesarios para aprovechar estas oportunidades, como las políticas, la innovación y la financiación. La energía nuclear, una tecnología consolidada que ha proporcionado electricidad y calor durante más de 50 años, ha enfrentado diversos desafíos en los últimos años. Sin embargo, está experimentando un resurgimiento gracias a un aumento en la inversión, avances tecnológicos y políticas de apoyo implementadas en más de 40 países. Con un crecimiento significativo de la demanda de electricidad proyectado para las próximas décadas, impulsado en parte por sectores como los centros de datos, resulta fundamental contar con fuentes de energía estables y de bajas emisiones.

 

A pesar del creciente interés en la energía nuclear, se deben superar diversos retos para que esta pueda desempeñar un papel fundamental en el panorama energético futuro. El informe de la AIE examina el estado actual de la energía nuclear a nivel mundial y aborda los riesgos asociados a políticas, construcción y financiación. También presenta perspectivas a largo plazo, cuantificando la capacidad esperada y las inversiones necesarias en energía nuclear hasta 2050. Según el análisis, los reactores modulares pequeños (SMR) podrían desempeñar un papel clave en esta nueva etapa, siempre que cuenten con innovación continua, apoyo gubernamental y nuevos modelos de negocio. El informe resalta mecanismos para desbloquear financiación y enfatiza la importancia de una planificación adecuada en términos de mano de obra y cadenas de suministro. Hace cuatro años, la AIE ya había señalado que la energía nuclear tenía el potencial de resurgir tras un periodo complicado derivado del Gran Terremoto del Este de Japón en 2011 y el accidente de Fukushima Daiichi. Actualmente, este resurgimiento es evidente, impulsado por una combinación de políticas gubernamentales, avances tecnológicos y un renovado interés del sector privado. Sin embargo, persisten importantes desafíos que deben abordarse.

 

El análisis incluye una evaluación detallada de cómo los países que consideran la energía nuclear como parte de su estrategia energética pueden superar dichos retos. Al mismo tiempo, reconoce que algunos países, incluidos algunos miembros de la AIE, no contemplan un papel para esta tecnología en su futuro energético, postura que la Secretaría de la AIE respeta plenamente. Este informe, por tanto, no debe interpretarse como representativo de las opiniones de estos países. A nivel global, la energía nuclear ocupa un lugar destacado entre las fuentes de generación de electricidad limpia y segura, siendo superada únicamente por la hidroeléctrica en términos de bajas emisiones. Para 2025, se espera que la energía nuclear alcance niveles récord de producción eléctrica, reafirmando el resurgimiento anticipado por la AIE en 2021. Además, el interés por esta fuente energética ha alcanzado niveles no vistos desde las crisis del petróleo de los años setenta, con más de 40 países apoyando su expansión.

 

La innovación tecnológica también está transformando el sector, especialmente a través del desarrollo de pequeños reactores modulares (SMR). Se prevé que los primeros proyectos comerciales de SMR comiencen a operar alrededor de 2030. Estos avances llegan en un momento crucial, cuando la demanda mundial de electricidad crece rápidamente, impulsada por el auge de sectores como la maquinaria industrial, los vehículos eléctricos, los centros de datos y los sistemas de aire acondicionado. El panorama nuclear internacional ha cambiado significativamente. Durante los años noventa, Europa lideraba el sector nuclear, pero su industria ha disminuido considerablemente desde entonces. En la actualidad, China alberga la mitad de los proyectos en construcción y se prevé que supere a la Unión Europea y Estados Unidos en capacidad nuclear para 2030. Sin embargo, la llegada de los SMR podría modificar este escenario.

 

Según la AIE, las principales empresas de SMR están ganando impulso, pero el éxito de esta tecnología dependerá del apoyo gubernamental, la innovación y la implementación de modelos de negocio que permitan reducir los costos rápidamente. Si estos factores se materializan, los SMR podrían representar el 10 % de la capacidad nuclear mundial para 2040. Por otro lado, la financiación continúa siendo un desafío importante para la energía nuclear. Históricamente, los proyectos nucleares han sido difíciles de financiar debido a su escala, intensidad de capital, largos plazos de construcción y complejidad técnica. Esto ha requerido una fuerte implicación gubernamental. Aunque la financiación pública sigue siendo esencial, no será suficiente; será necesaria una mayor participación del sector privado.

 

Recientemente, el sector privado ha mostrado un interés renovado en la energía nuclear, impulsado en parte por el potencial de los SMR. Empresas tecnológicas que operan centros de datos podrían utilizar su alta calificación crediticia para facilitar la financiación de proyectos nucleares. Reducir los riesgos de sobrecostos y retrasos será esencial para atraer tanto financiación pública como privada. Los SMR tienen el potencial de transformar el panorama de la financiación nuclear, al reducir significativamente los costos de inversión de los proyectos individuales. Asimismo, un marco regulador favorable, que incremente la previsibilidad de los flujos de caja y limite las responsabilidades, será crucial. Instrumentos como acuerdos de compra de energía a largo plazo, contratos por diferencias y modelos de base de activos regulados serán indispensables en mercados con alta volatilidad de precios.

 

Además, la estandarización, basada en diseños de reactores probados y su construcción en serie, permitirá reducir los tiempos y costos asociados, al tiempo que fortalecerá las cadenas de suministro y fomentará una mano de obra cualificada. En conclusión, las bases del mercado, la tecnología y la política están establecidas para un crecimiento sostenido de la energía nuclear en las próximas décadas. Con una demanda eléctrica en constante aumento, tanto para usos tradicionales como emergentes, la energía nuclear se presenta como una fuente limpia y gestionable que complementa las energías renovables, ofreciendo seguridad energética y reducción de emisiones.

 

 

Para leer más ingrese a:

https://www.iea.org/reports/the-path-to-a-new-era-for-nuclear-energy

https://iea.blob.core.windows.net/assets/21947d24-cbe3-4fbe-a5b7-5c94de5c60f2/ThePathtoaNewEraforNuclearEnergy.pdf

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